Cómo elegir una electroválvula

Cuando se debe elegir una electroválvula, muchas personas suelen tener dudas. Y es que hay tantos tipos y formas que hacen que sea bastante difícil decidir. Por fortuna, hay algunas cosas que pueden ayudarte a tomar una decisión.

En este artículo, vamos a contarte todo lo que necesitas saber para poder elegir de manera efectiva una electroválvula. Todos estos aspectos son claves a la hora de elegir una de ellas.

Consejos para elegir una electroválvula

Estos son unos sencillos consejos que te ayudarán a que puedas elegir de una forma bastante sencilla la electroválvula que necesitas.

Material

Las electroválvulas pueden estar fabricadas en diferentes materiales y hay varias cosas a tener en cuenta para elegir el adecuado. Los más comunes son el acero inoxidable, el cobre, aluminio, latón, entre otros. Generalmente hay que tener en cuenta la temperatura, presión o el uso que se le dará para decirse entre uno u otro.

Tipo de conexión

Por supuesto, hay que tener en consideración el tipo de conexión que se necesita antes de comprar una de estas válvulas. Hay varios modelos y tamaños que se adaptan a los diferentes tamaños de conexión. Generalmente es posible encontrarlas hasta de 2 pulgadas, aunque varía dependiendo del modelo.

Fluido

El tipo de fluido es también muy importante para la selección de la válvula adecuada. El diafragma interno que tiene este tipo de válvulas deberá ser capaz de soportar el tipo de fluido que pasará dentro de esta. Así que, es muy importante tener esto en cuenta antes de elegir.

Con normalidad abierta o normalmente cerrada

Esta es una característica básica y la que diferencia a estas válvulas de otras. Hace referencia a la posición del solenoide y el estado básico de estas válvulas. Esto va a depender del uso que se le va a dar, ya que sabrás si necesitas que la válvula en su estado pasivo esté abierta o cerrada.

Cantidad de vías

Las electroválvulas pueden encontrarse de entre 2 y 5 vías y esto hace referencia a la cantidad de salidas y entradas que tiene. Esto dependerá exclusivamente del uso que se le va a dar.

Presión

Las válvulas son capaces de soportar una cantidad definida de presión y esto es algo importante para tener en cuenta. Si la presión es mayor a la soportada por la válvula, esta va a terminar fallando y ocasionando fugas o que esta se estropee por completo.

Temperatura

El diafragma interno con el que cuentan estas válvulas tiene una temperatura máxima en la que trabajan. De esta manera, se garantiza el funcionamiento y durabilidad de esta. Es importante que este rango de temperatura sea similar al del líquido que pasará por ella. En caso contrario, puede comprometer y desgastar el diafragma ocasionando que falle la válvula.

Voltaje

Estas válvulas al ser eléctricas trabajan con electricidad y estas son capaces de soportar un voltaje específico. Es importante que se elija una de acuerdo con el diseño del proyecto. Estas suelen estar disponibles en 48, 127 y 220 vac o en 12, 24 y 48 vdc.